
Con todas mis fuerzas deseo que estas fiestas pasen de puntillas y sin hacer ruido, que podamos plantarnos en un año nuevo, que sin ninguna duda (al menos en mi caso) será mucho mejor que este.
Estaré ausente hasta finales de Enero, por eso (en contra de mis principios de felicitar estas fiestas) os voy a desear unos Felices 365 días del próximo año, que cada día podáis extraer un pellizco de felicidad.
Y ya sin liarme mucho más, os planto mi última entrada del 2008, en la cual "el Grande" resume a la perfección mi idea de estas fiestas.
Un beso a todos y Gracias por vuestro tiempo.
Estaré ausente hasta finales de Enero, por eso (en contra de mis principios de felicitar estas fiestas) os voy a desear unos Felices 365 días del próximo año, que cada día podáis extraer un pellizco de felicidad.
Y ya sin liarme mucho más, os planto mi última entrada del 2008, en la cual "el Grande" resume a la perfección mi idea de estas fiestas.
Un beso a todos y Gracias por vuestro tiempo.
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El fin de año huele a compras,
enhorabuenas y postales
con votos de renovación;
y yo que sé del otro mundo
que pide vida en los portales,
le voy a hacer una canción.
La gente luce estar de acuerdo,
maravillosamente todo
parece afín a celebrar.
Unos festejan sus millones,
otros la camisita limpia
y hay quien no sabe que es brindar.
Mi canción no es del cielo,
la estrellas, la luna,
porque a ti te la entrego,
que no tienes ninguna.
Mi canción no es tan sólo
de quién pueda escucharla,
porque a veces el sordo
lleva más para amarla.
Tener no es signo de malvado
y no tener tampoco es prueba
de que acompañe la virtud:
pero el que nace bien parado,
en procurarse lo que anhela
no tiene que invertir salud.
Por eso canto a quien no escucha,
a quien no dejan escucharme,
a quien ya nunca me escuchó:
al que en su cotidiana lucha
me da razones para amarle,
a aquel que nadie le cantó.
Mi canción no es del cielo
las estrellas, la luna,
porque a ti te la entrego,
que no tienes ninguna.
Mi canción no es tan sólo
de quien pueda escucharla
porque a veces el sordo
lleva más para amarla.
enhorabuenas y postales
con votos de renovación;
y yo que sé del otro mundo
que pide vida en los portales,
le voy a hacer una canción.
La gente luce estar de acuerdo,
maravillosamente todo
parece afín a celebrar.
Unos festejan sus millones,
otros la camisita limpia
y hay quien no sabe que es brindar.
Mi canción no es del cielo,
la estrellas, la luna,
porque a ti te la entrego,
que no tienes ninguna.
Mi canción no es tan sólo
de quién pueda escucharla,
porque a veces el sordo
lleva más para amarla.
Tener no es signo de malvado
y no tener tampoco es prueba
de que acompañe la virtud:
pero el que nace bien parado,
en procurarse lo que anhela
no tiene que invertir salud.
Por eso canto a quien no escucha,
a quien no dejan escucharme,
a quien ya nunca me escuchó:
al que en su cotidiana lucha
me da razones para amarle,
a aquel que nadie le cantó.
Mi canción no es del cielo
las estrellas, la luna,
porque a ti te la entrego,
que no tienes ninguna.
Mi canción no es tan sólo
de quien pueda escucharla
porque a veces el sordo
lleva más para amarla.
¡Felices Fiestas!