Todavía tengo casi todos mis dientes
casi todos mis cabellos y poquísimas canas
puedo hacer y deshacer el amor
trepar una escalera de dos en dos
y correr cuarenta metros detrás del ómnibus
o sea que no debería sentirme vieja
pero el grave problema es que antes
no me fijaba en estos detalles.
M. Bendetti
lunes, 6 de julio de 2009
A veces olvido
A veces olvido que soy libre, y retorno a mi prisión porque yo quiero…
… Pero la piel tiene memoria, entonces, a veces olvido que soy prisionera.
21 comentarios:
Hola:
Tanto dicho en tan poco verso. Me ha gustado.
Besos.
Pocas palabras.Pero demoledoras.
¡Qué gusto volver a leerte!
Besos.
Cruel realidad, ser sumisamente prisioneros...por suerte nos queda nuestra piel.
Cada palabra, de un valor desgarrador.
Una sonrisa.
Querida Mónica la memoria de tus manos es la de la poesía, sin duda. Cuídate mucho y arropa bien tu libertad. Un beso.
la piel y sus impulsos que aceleran la movilidad de un abismo lejano...
la piel y sus impulsos que aceleran la movilidad de un abismo lejano...
Hay que intentar ser una libre prisionera...
;)
Pero la pel tiene memoria...
Que hermoso blog tenès Monica.
me quedo un rato mas, perdido entre tanta s letras
Hacía algun tiempo que no venía por aqui. Ahora me he quedado sin palabras con tu texto. Me tocó, me invadió, me emocionó. Un beso
La libertad es un mito moderno.
Hermoso Monica, hermoso.
Saludos!
Hola Monica, olvidate de esas cadenas, y vuela muy alto...
Te dejo mi huella y un abrazo inmenso.
QUE BELO BLOG...
QUE BELAS POESIAS...
PARABÉNS!!!!
BJS*
Vivimos atados a nuestra libertad.
Hermosa brevedad la tuya. Gracias por los versos. Volveré.
Me gustó de verás y que razón tienes encima.
A veces las cadenas nos las ponemos nosotros, quizás sea que nos sentimos seguros así, quién sabe.
Fuerte soplan tus palabras,erosionando el sentir.
Gracias disfrute mucho con tu blog.
Y a vece s olvido mi memoría y no hay pendrive que me salve...
Se te hecha de menos,a ti y a tus letras...
Espero que todo vaya bien.
Un beso.
Sólo las prisiones de la mente son eternas, de las demás se puede escapar. Un gran beso.
el olvido y la memoria de nuestro ser se convierten en la historia de nuestra vida
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