Se paraliza mi espíritu
cuando tu nombre amenaza
escondido en cualquier calle.
Me sacudo el polvo del vestido negro
y acaricio mi frente
hasta borrarme el olvido.
Te espero detrás del puente
en la esquina con la curva de mi sonrisa
Todavía tengo casi todos mis dientes casi todos mis cabellos y poquísimas canas puedo hacer y deshacer el amor trepar una escalera de dos en dos y correr cuarenta metros detrás del ómnibus o sea que no debería sentirme vieja pero el grave problema es que antes no me fijaba en estos detalles. M. Bendetti
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10 comentarios:
El que espera sabe que toda esquina es un descubrimiento y tal vez una decepción derrotada por la esperanza. Un gran beso.
Me alegra volver a leerte y saber que sigues escuchando los silencios de el corazón y el alma...,y con lo que te cuentan,plantar estos versos alucinantes sobre el papel.
"hasta borrarme el olvido".Genial.
Un beso
El placer es mío Mónica. Me quedaré porque nunca me he ido de tus letras. Me alegro mucho por tu regreso.
Un bico.
Celebro también tu retomar de palabras hermosas.
Un besiño.
Vuelves con tanta intensidad, que las tripas se remueven,hostigan las emocines y finalmente abrazan casi con descaro ese corazón valiente, dibujando la curva de tu sonrisa.
la mía, te acompaña
exaba de menos tus poemas, igual que exo de menos tus comentarios por mi blog!!! Un beso ermana
¡Son muy buenos tus poemas! De cálida intimidad e inteligentes y bellas metáforas.
He leído varios y dejo aquí comentario.
He pasado, dejo beso.
...acaricio mi frente hasta borrarme el olvido... ¡Qué maravilla, rubita querida!
Todo muy bien, espero.
Besos.
Hola Monica muchisimas gracias por pasar por mi blog y quedarte tanto!
voy apasear aqui entre tus letras a ver que descubro ....
WOW!!!
simplemente preciso!
no digo más...lo has dicho todo
buenísimo
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