Hoy salgo a un mundo en el que tu,
nunca has existido
camino con la cabeza alta
por calles que no recuerdan tu nombre
y mucho menos tú apellido
o los abrazos que ella se invocaron.
Me he arrancado a mordiscos
las marcas que habías gravado en mi piel,
y ya estoy recuperada,
limpia,
nueva,
mía…
Se han evaporado las huellas
que me marcaban el camino
y me obligaban a caminar hacia atrás
como un cangrejo
Y ahora por fin
sin tu sombra
el sol me ilumina todo el cuerpo,
y la mochila que no vacié contigo
está por fin vacía con tu ausencia.
9 comentarios:
a veces es mejor desprenderse para poder avanzar, siempre que no nos demos cuenta de que aquello nos era imprescindible... buen poema, un saludo!
entonces ya está recorrido lo más difícil del camino, una vez que has soltado la mochila, es raro empezar a andar, pero antes de darte cuenta, estarás corriendo.
Precioso todo lo que escribes. Un saludo.
Y yo me pregunto...¿cómo se consigue?.
Tan tremendo como deseable.
Una sonrisa
¡La que sabe, sabe!
Magnífico poema.
Un beso gigante.
Parece radiante el camino que te espera.
Que lo disfrutes.
Besos.
Que guay ahora llenaras la mochila de un monton de historias que nos contaras por aqui....
P.D. no se nada de ti... pero me alegro de leerte un abrazito
:)
Feliz Año Mónica.
Besos.
El camino queda; poema nada críptico.El sendero parece claro y ligero.
Me gusta su sonido.
Enhorabuena.
Ya te alcanzo, deja que me libere del lastre que me queda ;).
Que gustazo leerte.
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